
El Neuroarte como forma de oración es una forma creativa de involucrar a las personas en la oración y la meditación. Conny Hubbard desarrolló este método basado en algunos de los principios del arte neurográfico.
Este enfoque puede ser utilizado por cualquier persona y en cualquier lugar. Es una forma fácil, calmante, consciente y enfocada de orar, y para eso bastan simples herramientas en manos. No es necesario tener experiencia previa alguna con arte.
¡Toma tus hojas de papel, unos lápices, quizás crayones y cualquier otra herramienta de dibujo y ven a aprender esta forma creativa de meditar y orar!
INFORMACIÓN
180 DÍAS DE ACCESO
AUDIO Y SUBTÍTULOS
PÚBLICO OBJETIVO
Desarrolladora de este taller
Conny es nativa de Baviera, Alemania. Está casada con su marido estadounidense desde 1978. Después de que los dos vivieron en diferentes países y regiones de los Estados Unidos, ahora viven en la Carolina del Norte. Le encanta ser creativa y usar sus dones creativos para bendecir a los demás.
Presidente de la Plaza del Encuentro
Es doctora en psicología y ha dedicado su vida a ayudar a las personas a vencer los desafíos de la vida. Pionera nata, es responsable por el nacimiento de muchos ministerios, entre ellos: Compañeros de Yugo, Eirene de Brasil, el Psicodrama en Ecuador y el movimiento de la Psicoterapia EMDR en Brasil y en otros países de América Latina y de Europa. Autora de muchos libros, su visión es ver a la Iglesia como un lugar de refrigerio para el alma herida, sostenida por el amor de Jesús. Esly está casada con el misionero retirado Ken Grant que sirvió a Dios en Ecuador, Bolivia, Estados Unidos y Canadá, su tierra natal, y que fue criado en China y heredó la visión misionera de sus padres que trabajaron con la China Inland Mission de Hudson Taylor. En la actualidad, Esly está comprometida con herramientas de la Iglesia para poder atender mejor las necesidades de sus miembros.
Evaluaciones
5
Máxima calificación
Gloria Contreras
Neuroarte, una nueva forma de oración
Excelente, mientras lo escuchaba me emocioné mucho, el Espíritu Santo estaba haciendo algo nuevo.
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